Valoración estadística de los alcances y límites del Informe 2006
1 Dado que la población en situación de vulnerabilidad social en España no está censada como tal, se debería tomar como referencia para estimar el universo posible (con todos los riesgos que implica esta asimilación de situación de renta con situación de vulnerabilidad social) el cálculo del INE-EUROSTAT, que establece que el 20% de la población española está "bajo el umbral de la pobreza". Según este dato, admitido y utilizado generalizadamente en estudios sociales, como FOESSA y el propio Plan Nacional de Acción para la Inclusión Social (PNAIN) del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, estaríamos ante una estimación de 8.800.000 personas.
2 Si sobre esa hipotética población de 8.800.000 se pudiera extraer una muestra aleatoria (lo cual no es posible en la práctica porque muchas personas, por su propias circunstancias, van a escapar de los métodos y redes de entrevistas habituales), con una muestra de 7396 individuos se tendría un margen de error de ± 1,5%, para un intervalo de confianza del 99%.
3 Dado que no es posible extraer esta muestra aleatoria por los métodos habituales, la mejor aproximación posible sería contar con una amplia base de datos de personas que, al acudir en busca de apoyo ante diversas situaciones de vulnerabilidad, se identifican, en principio, como "personas en situación de vulnerabilidad". Cruz Roja, por su misión institucional, está dedicada a la atención de personas en tal situación, por lo tanto quienes figuran en su base de datos (AIS) son personas que cumplen con esta condición específica. Cruz Roja es una entidad de acción social de carácter generalista, que atiende a la mayor cantidad y diversidad de personas con situaciones de vulnerabilidad, posee un nivel de implantación de ámbito estatal, con más de 800 "antenas" en todo el territorio, y una administración centralizada de sus bases de datos personales.
4 La muestra con la que se trabaja en este Informe parte de una base de datos de 83091 personas atendidas a fecha julio 2006, de la cual se ha realizado un muestreo aleatorio estratificado de 11679 registros, según las áreas de intervención social (datos de la Memoria de la institución de 2005). La representatividad y el error muestral, por tanto, van referidos al conjunto de personas atendidas por CRE. En el caso concreto de las personas menores de edad, se ha empleado una muestra específica de 6142 registros, correspondientes al total de los menores de la base de datos.
5 ¿Hasta qué punto son representativas estas 83091 personas del conjunto de los supuestos 8.800.000? Si tenemos en cuenta que con 7396 individuos en una muestra aleatoria tendríamos asegurada la representatividad, las 83091 personas participantes de CRE serían una muestra fiable en gran medida. No obstante, se debe admitir que este hecho no se puede determinar estadísticamente, debido a los posibles sesgos que introduce el no tomar a los individuos aleatoriamente, sino a través del hecho de que se trata de personas vinculadas a CRE.
6 ¿Qué personas pueden estar en situación de vulnerabilidad y no estar vinculadas de ninguna manera a CRE? Si se pudiera responder con total precisión a esta pregunta, se podría determinar el sesgo que puede tener la muestra utilizada. Como esto no resulta posible con los datos actuales, sólo se pueden apuntar hipótesis. La hipótesis de un máximo sesgo sería que existieran grupos de personas que estuvieran infra-representados o no representados en absoluto. No representados en absoluto, parece prácticamente imposible que pueda haber; al comparar los datos de la memoria de CRE con los datos sociales disponibles en España, por ejemplo en el PNAIN, no se observan problemáticas sociales que no estén cubiertas por CRE. Con respecto a los que pudieran estar infra-representados, tal vez se podría considerar a aquellos que fueran solamente atendidos por organizaciones específicas, como por ejemplo las que trabajan con personas con discapacidades (ONCE, FEAPS, CERMI...), en tanto éstas fueran menores de 65 años de edad (dado que los mayores de esa edad sí son en gran número participantes de CRE, a través de los programas de mayores). Aquellas personas que padecen las denominadas enfermedades raras podrían también ser exclusivamente asistidas por entidades específicas, pero no hay cifras claras sobre la incidencia de dichas enfermedades en el total de la población. Otro sector podría ser el de las personas que, debido a su aislamiento voluntario o forzoso, no estén vinculadas a entidades sociales, como algunas personas reclusas o institucionalizadas, que puedan estar menos vinculadas con las redes de atención. No obstante, ante esta hipótesis de máximo sesgo, se puede plantear la del sesgo mínimo, que es decir que estos grupos antes referidos sí estén presentes en la muestra de CRE, con la suficiente representatividad estadística.